martes, 16 de septiembre de 2008

Sabotean teléfonos Ocoa


Desconocidos robaron el viernes pasado los paneles solares y baterías del enlace Sabana Buey-Loma Angelita-San José de Ocoa, de la Compañía Dominicana de Teléfonos (Codetel), lo que afectó la comunicación telefónica en Ocoa y ocasionó cuantiosas pérdidas a la empresa.
Los ladrones cometieron esa acción criminal en momentos en que la provincia de Ocoa está en una situación de emergencia debido a los daños causados por la tormenta Ike y otros fenómenos que la han azotado en los últimos meses.
Codetel hizo la denuncia ante el Instituto Dominicano de Telecomunicaciones (Indotel), que dirige el doctor José Rafael Vargas.
De acuerdo a Indotel, Codetel informó que la acción vandálica que afectó los servicios de telefonía fija, móvil y de datos en esa provincia, se produjo el 12 de este mes, pero fue este martes cuando Indotel lo divulgó. Los inconvenientes fueron corregidos al día siguiente.
“El pasado 12 de septiembre a las 6.58 de la tarde sufrimos la salida del enlace Sabana Buey-Loma Angelita-San José de Ocoa, que afectó en dicha zona nuestros servicios fijo, móvil y de datos”, informó Codetel a Indotel.
Agregó que tan pronto se presentó esa situación, “y tomando en cuenta el aislamiento de decenas de comunidades por la vía terrestre, el personal de la empresa comenzó a trabajar y determinó que la causa fue el robo de paneles solares y baterías en el repetidor Loma Angelita”.
Destacó que un equipo técnico de Codetel se trasladó a esa localidad, reemplazó los equipos robados y logró normalizar el servicio a las 10:25 de la mañana del día 13.
De acuerdo a Codetel, pasan de 500 los robos de equipos y cables de los que ha sido víctima este año, y añadió que denunció la situación durante un encuentro que sostuvo junto a otras empresas de telecomunicaciones con las autoridades del Indotel.
Informó que para enfrentar esos robos Indotel dispuso la creación de una comisión multi-institucional que estará presidida por el general Claudio Peguero, de la Policía.
En el encuentro, que presidió el titular de Indotel, participaron representantes y encargados de seguridad de las compañías Codetel, Orange Dominicana, Trilogy Dominicana, Tricom, Adocasa, Cable Max, Cable TV Dominicana, Éxito Cable Visión, Cable Onda Oriental, Redes Televisivas Satelital, Aster y Telecable Dominicano.
Ocoa ha sido una de las provincias más afectadas por los fenómenos atmosféricos de los últimos tiempos, incluidas las tormentas Noel y Olga, en noviembre y diciembre de 2007. El último golpe se lo dio el huracán Ike la semana pasada, que destruyó los aproches de los puentes, dañó la agricultura y afectó otras infraestructuras.
Problema viejo
El robo de cables y equipos no sólo afecta a las empresas de telecomunicaciones, sino también a las generadoras y distribuidoras de electricidad, que con frecuencia denuncian que son afectadas por robos millonarios.
Normalmente esos robos son cometidos por traficantes de metales que sustraen los cables para extraer el cobre.
Pero de esos robos no sólo son víctimas las empresas de telecomunicaciones y distribuidoras de energía eléctrica, sino también el propio Estado, pues lo traficantes de metales roban los cables del alumbrado de los puentes, plazas públicas y las tapas de las alcantarillas del drenaje pluvial.
A esas acciones no han escapado ni las estatuas de figuras como Juan Pablo Duarte, Gregorio Luperón y Máximo Gómez.
Las autoridades en algunos casos han hecho redadas que incluyen allanamientos a negocios dedicados a la compra y venta de metales, pero el problema ha persistido a pesar de que muchas personas han sido arrestadas y sometidas.
A pesar de no ser productora, República dominicana importa anualmente miles de toneladas de metales, lo que incentiva el robo de diferentes objetos por parte de personas inescrupulosas.
La Dirección General de Aduanas ha estado haciendo esfuerzos por enfrentar el problema, pero todo ha sido en vano.
Villa Consuelo y Villas Agrícolas son los principales puntos de compra y venta de metal en Santo Domingo.
En esos barrios hay un intercambio intensivo de hierro viejo, chatarras y todo todo tipo de metales para exportación, sin el menor control por parte de las autoridades.

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